En 1998, cuatro años después de la muerte del cantante, Nick Broomfield iba a hacer un documental sobre el viaje musical de Kurt Cobain con Nirvana y los orígenes de la banda; pero la idea cambió totalmente. La razón: Courtney Love.
“Cuando llegamos a Seattle – lugar donde falleció el cantante - Courtney había escuchado sobre el proyecto y, en ese momento, perdimos parte de la financiación. Fue entonces que tomamos otro rumbo en la trama. Nos enfocamos en cómo alguien trataba de impedir la filmación de esta película, qué papel cumplió ella en la última etapa de vida de Cobain. Esto lo hizo aún más interesante”, contó Broomfield a Rolling Stones.
Fue así como, acompañado de un camarógrafo, Nick empezó su travesía explorando las teorías de conspiración que señalaban a Courtney como la mente detrás de un posible “asesinato” al líder de Nirvana.
La producción recorre por los lugares donde vivió el músico, entrevista a su tía quien muestra las primeras grabaciones de Kurt; conversa con sus amigos, quienes hablaban del tema con temor a represalias de Courtney, con el supuesto hombre que fue contratado para asesinarlo y hasta con la niñera de Frances. Esta da detalles de primera mano sobre los últimos días de vida del cantante. También hay una conversación con el investigador privado Tom Grant, quien está seguro que Cobain fue asesinado.
Afortunadamente, este documental está ahora disponible en Netflix con el nombre de “Kurt & Courtney”. Y si eres fanático de Nirvana, te invitamos a verla y sacar tus propias conclusiones.