Carrie Fisher no está más con nosotros. La actriz que interpretaba a la Princesa Leia de Star Wars falleció la mañana del martes tras varios días internada debido a un paro cardiaco. Una escena eliminada de The Force Awakens se ha difundido en las últimas horas por el significado que tiene para los fans de Carrie.
Son casi 15 segundos que no fueron parte del corte final del Episodio VII. La Princesa, ahora como General de la Alianza Rebelde, despliega su ironía. Esa era una de las cualidades que tenía la Princesa Leía y que, en realidad, eran una filtración de la propia personalidad de Carrie, que se dejó notar en muchas de las respuestas que ella dio a la prensa.
Cuando Leia le pide a los soldados que contacten al Senador Galáctico para avisarle de las medidas que tomará contra el Imperio, una de ellas le dice que no la van a escuchar. Entonces Carrie responde: "No todos los senadores creen que estoy loca, o puede que sí, pero no me importa".
Así era Carrie, una mujer admirable que luchó contra su adicción a las drogas y que vivió afectada por la bipolaridad, enfrentándola y viviendo a su manera, criticando a la industria del cine y al superficialidad de todos. Siempre la recordaremos.