Varios objetos personales de Freddie Mercury, el cantante de la legendaria banda Queen, están siendo subastados por su amiga y expareja Mary Austin, a quien el vocialista le dejó parte de su fortuna. Uno de esos objetos fue el piano con el que compuso ‘Bohemian Rhapsody’, que fue vendido por una millonaria.
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Piano de Freddy Mercury fue vendido en más de 2 millones de euros
El legendario piano con el que Freddie Mercury compuso una de las canciones más significativas de Queen, ‘Bohemian Rhapsody’, ha sido vendido recientemente por una gran cifra. De acuerdo con la información difundida, dicho objeto musical se vendió por 1.74 millones de libras que equivalen a más de 2 millones de euros.
El objeto personal que fue de Freddie Mercury, se vendió el pasado miércoles en una subasta organizada por su gran amiga y expareja Mary Austin. El cantante de Queen compuso ‘Bohemian Rhapsody’ con dicho instrumento, por lo que el Yamaha G2 ya tendría un nuevo dueño. Asimismo, la hoja en donde estuvo la primera versión de dicha canción, se logró vender por $1.7 millones de dólares.
Previamente a la subasta, Mary Austin dijo lo siguiente, sobre el piano de Freddie Mercury:
“Freddie trataba la Yamaha con absoluto respeto. Lo consideraba más que un instrumento, era una extensión de sí mismo, su vehículo de creatividad. Nunca fumaba junto al piano ni apoyaba un vaso encima y se aseguraba de que nadie más lo hiciera. El piano siempre estaba impecable".
Entre las posesiones más codiciadas del recordado cantante de Queen, también están subastando algunos trajes que usó en el escenario, joyas y cuadros de su enorme colección de arte. Hasta el momento el piano, es el objeto que tuvo mayor impacto en la venta.
¿Brian May aún siente nostalgia por los objetos de Freddy Mercury?
Por otro lado, Brian May no se habría mostrado del todo contento con la subasta, pues en sus redes sociales admitió que “es demasiado triste” para él. Así lo escribió hace unos días, a través de una publicación que compartió en su cuenta de Instagram, donde mencionaba:
“Inevitable pensar tanto en Freddie en estos días extraños. En el momento en que se tomó esta foto estoy seguro de que no parecía muy importante ver los dedos de Freddie bailando en mi propia guitarra casera. Ahora evoca oleadas de afecto y grandes recuerdos. Se le echa mucho de menos (...) No puedo mirar. Para nosotros, sus amigos y familia más cercanos, es demasiado triste".