¿La villada de la historia? Detalles de la viral historia de Maresa Friedman, una chica estadounidense que se hizo conocida, luego de resaltar su caso en su cuenta de TikTok. Todos los detalles y las críticas que recibió por el video.
¿Qué pasó exactamente?
El pasado 19 de octubre, Maresa Friedman se hizo viral en TikTok, al subir un particular video. Al parecer una familia de 4 miembros se acercó a la joven estadounidense, para solicitarle que les cediera un asiento, pero la chica se negó rotundamente.
Desde aquel día, la viral chica de TikTok ha recibido diferentes comentarios, aunque varios de ellos son a favor. ¿Por qué se originó toda la polémica? Pues resulta que Maresa Friedman, no quiso darle su asiento a aquella familia y poco después, explicó los motivos en otro video.
Maresa Friedman, la viral chica de esta historia, relató a las pocas horas su particular historia. Ella subió un video de 3 minutos de duración, respondiendo varias incógnitas de sus seguidores, pues aparentemente querían conocer más a fondo este caso.
De acuerdo a lo que resalta la viral chica en TikTok, una familia se le acercó a preguntarle si podía cederles el asiento en primera clase, a lo que ella se negó. Esto generó diferentes bandos en la red social, pues a pesar que la mayoría la apoya, hay algunos que la han condenado por “su falta de empatía”.
¿Qué explicó la chica en sus redes sociales?
En su viral video, que hasta la fecha ya acumula más de 2.7 millones de reproducciones, Maresa Friedman redactó lo siguiente:
“No soy una villana por no moverme del asiento en primera clase, por el que pagué la tarifa completa, también soy madre, así que se llama planificar con anticipación.”
Asimismo, según el relato de la viral chica, la familia le pidió el cambio de su asiento por el de ellos y así puedan sentarse en la misma fila:
“¿Por qué todos los demás deben acomodarse, como si esto fuera algo diferente como, ‘oh, estamos en el autobús y tenemos que ceder un asiento para un par de paradas?’, sí, claro. No soy una villana”, detalló Maresa Friedman en sus argumentos.
No obstante, la joven estadounidense al parecer no detalló si el cambio de asiento, era dentro o fuera de la misma clase: “Si compra boletos económicos básicos, no debe tener expectativas de sentarse juntos.”