La ciudad de Cadillac es un pequeño poblado al norte de Michigan donde tienen un especial afecto por Kiss. En 1975, los músicos llegaron para felicitar al equipo de football, que dedicó su inesperado éxito a los rockeros.
Recordando los 45 años de esa fecha, los vecinos de Cadillac decidieron rendir homenaje a la banda develando un monumento en hu honor y realizando pasacalles y festivales.
La fecha se ha vuelto una fiesta importante e icónica en la ciudad. Los estudiantes de 1975, ahora convertidos en padres de familia, ponían la música de Kiss antes de sus partidos y lograron el éxito.
Aunque los miembros de la banda no pudieron estar presentes, siguieron las celebraciones a través de las redes sociales.