Un reciente estudio publicado por el boletín Frontiers in Human Neuroscience, demostró que escuchar música agresiva reduce los niveles de estrés e irritabilidad en las personas.
El estudio, que se realizó a personas entre 18 y 34 años, buscó que las participantes recuerden sus momentos de mayor irá. Luego se les hizo escuchar heavy metal y todos presentaron una disminución de la ira y un aumento de emociones positivas y de la creatividad.
Así se concluyó que las personas que escuchar rock pesado son más relajadas y menos agresivas que quienes no lo hacen. Esto debería acabar finalmente con el mito que condena a los metaleros como personas peligrosas.
Entonces, amigo metalero ¡siéntete orgulloso! mientras el resto del mundo reprime sus sentimientos de ira, tú aprendiste a dejarlas fluir con buena música.