El cantante de Joy Division, Ian Curtis, falleció en 1980 y desde esa fecha su tumba es el punto de encuentro de miles de sus seguidores. Recuerdos, velas, flores y miles de detalles rodean la tumba de Ian Curtis, que se suicidó a los 23 años de edad y está enterrado en el cementerio de Maccflesfield, Cheshire.
Hace pocos días se confirmó que a la tumba de Ian Curtis le faltaba una de las piedras centrales que daban forma a su sepultura y era donde se ponían las ofrendas florales.
Pero esta no es la primera vez que se quieren roban alguna parte de la tumba del cantante de Joy Division. En el 2008, se robaron una insignia que decía “Love Will Tear Us Apart”, recordando la canción más famosa de Joy Division.
Es más, en la cuenta de Twitter Joy Division Central se ha asegurado que a pesar de no haber podido robar esta segunda placa, sí se ha intentado boicotear la inscripción de la misma.
Definitivamente, Ian Curtis es un ícono de la cultura rock de la música británica de finales de los años 70 que conectó con los jóvenes rápidamente. Sin embargo, sus problemas de depresión lo llevaron al suicidio. Luego de su muerte, la banda se disolvió y se fundó como New Order.