La historia de los músicos con la cocaína no es algo nuevo. Desde los 50, diferentes artistas han tratado de lidiar con estupefacientes. Algunos tuvieron un fatal desenlace, pero otros pudieron salir de ellas.
Rod Stewart fue uno de estos artistas y en su autobiografía publicada en el 2012, “Rod: The Autobiography”, contó que ponía la cocaína en cápsulas que luego ingresaba por el ano para no dañar las cavidades nasales.
“Empecé a comprar cápsulas contra la gripe. Las separaba en dos mitades y reemplazaba su contenido con una pizca de cocaína que luego la ingresaba analmente. Se disolvía sin esfuerzo en el cuerpo”. El músico, por esos años, indicó que solo era un consumidor social de cocaína
En el libro, que actualmente se puede encontrar en Amazon, el intérprete de “Young Turks” también reveló que perdió la virginidad a los 16 años con una mujer mayor, y que fue ella la que inspiró algunas partes de la canción “Maggie May”.