Metallica, fue fundada en 1982 por el cantante James Hetfield y el baterista Lars Ulrich. Si bien el glam metal era muy popular en los años 80, la banda decidió no irse por lo comercial y originaron un nuevo subgénero del heavy metal, el thrash metal. Este era una fusión compleja de las estructuras del heavy metal británico con una velocidad del hardcore y una versión más agresiva del punk.
Las canciones eran mucho más pesadas, llenas de solos y riffs; además, las letras de sus canciones eran sobre temas como las adicciones, la depresión y la corrupción políticas. Temas que fueron ignorados por el glam en su momento.
La influencia de AC/DC
Durante una entrevista con la revista Uncut, el guitarrista Kirk Hammett y el baterista Lars Ulrich mencionaron que “The Black Album” nació de otras influencias, incluyendo del clásico “Back in Black” de AC/DC. Además, consideraron que después de tantos años siguiendo el mismo camino, llegaron a un punto de inflexión con la creación de este proyecto.
“Luego de terminar con …And Justice For All y los consecuentes dos años de gira, sabíamos que no podíamos seguir por ese camino”, reconoció Ulrich, co-fundador de la banda. “Nos habíamos chocado contra un muro. La última canción en el disco era ‘Dyers Eve’ y dura seis o siete minutos, repletos del rollo más progresivo y distinto que Metallica era capaz de ofrecer. Después de tocar todas esas canciones durante un par de años, dijimos ‘tenemos que reiniciarnos'”.
“No fue un disco fácil de hacer porque queríamos un sonido muy concreto. Queríamos que todo saliera lo mejor posible a nivel sonoro, pero también en lo que se refería a la calidad de las canciones y a cómo las interpretábamos. Así que fuimos y -creo que yo soy el primero que menciona esto- hablamos sobre sacar un disco parecido al ‘Back In Black’ de AC/DC, un LP lleno de singles. Ese era el concepto, el de canciones que suenan como singles, pero que no lo son”, agregó Kirk Hammett, guitarrista de Metallica.
The Black Album
El 12 de agosto de 1991 se lanzó el quinto álbum de Metallica, el cual se popularizó bajo el nombre de “The Black Album”. Debido a que el cover de su disco era negro con una serpiente cascabel junto al nombre de la banda, lejos de las portadas coloridas y violentas del heavy metal de esa época.
El álbum fue producido por Bob Rock y tuvo éxitos icónicos como “Sad but True”, “The Unforgiven”, entre otros. Este se convirtió en el proyecto más vendido de la banda, pues vendió más de 500.000 copias en su primera semana solamente en Estados Unidos y superó los 40 millones de copias en el mundo. El trabajo fue premiado con un Grammy en 1992.