Recientemente el músico de Kiss, Paul Stanley, recordó la primera vez que tocó una guitarra y cómo con los años se volvió parte de su vida. El cantante confesó que obtuvo su primera guitarra, aproximadamente a los 13 años.
¿Qué pasó con Paul Stanley?
En una reciente entrevista con ‘Gibson TV’, Paul Stanley mostró su impresionante colección de guitarras, en donde evidenció algunas de sus ‘Gibson Les Paul’ favoritas. El vocalista de Kiss también habló sobre cómo aprendió a tocar este instrumento.
“Cuando era pequeño y veía a Eddie Cochran en la tele. Por alguna razón, parecía un Elvis Presley aún más peligroso. Había algo en él que era canalla y parecía despiadado, una gran actitud. Así que ese fue realmente el comienzo de mi introducción a la guitarra, aunque crecí en una familia con mucha música folk y bluegrass, ópera, música clásica y todo eso”, resaltó al inicio de la conversación.
Sin embargo, lo más impresionante fue cuando el cantante de Kiss reveló que estaba confiado que podía tocar la guitarra cuando nunca lo había hecho anteriormente:
“Pero estaba convencido de que podía tocar la guitarra cuando no tenía ni idea, simplemente porque había algún tipo de conexión. La guitarra es realmente el instrumento del blues, que dio origen al rock and roll”.
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¿Cómo consiguió su primera guitarra?
En esa misma línea, Paul Stanley recordó cómo obtuvo su primera guitarra, ya que fue gracias a un regalo que le hicieron sus padres.
“Dios mío, no paraba de decírselo a mis padres. Cumplía 13 años y no paraba de decirles: ‘Quiero una guitarra, una guitarra eléctrica’. Justo cuando cumplí años, mi madre me dijo: ‘Mira debajo de la cama’. Miré debajo de la cama y se me encogió el corazón porque vi una caja de cartón enorme”, añadió.
No obstante, el músico de Kiss se quedó decepcionado cuando se dio cuenta que no le regalaron una guitarra eléctrica:
“Lo saqué y lo abrí, y era una guitarra de cuerdas de nylon usada. Me quedé destrozado porque no se puede tocar rock and roll con eso. Lo cerré y lo metí debajo de la cama. Un par de meses más tarde, me dije: ‘Déjame intentarlo’. Así que ese fue realmente el comienzo, era una guitarra de cuerdas de nylon, y yo tenía probablemente 13 años... Le cogí el tranquillo muy rápidamente. Fui a unas cuantas clases, y quería ir más rápido, y por alguna razón, el profesor decía: ‘No. Tienes que quedarte a este ritmo’. Así que él se fue y la guitarra se quedó”.